Notre Seigneur Jésus Christ Roi de l'Univers — Année B

« C’est toi-même qui dis que je suis roi » (Jn 18, 33b-37)


Ce dimanche du Christ Roi, fin de l'année liturgique, nos soeurs (Lucia, Carmen, Petronila, Monica et Mafy) de la communauté de Maïpu au Chili partagent lumières, appels, joie reçus de l'Evangile. Merci!!!


 

 

El Evangelio segun San Juan 18 ; 33 – 37


Pilato volviò a entrar en el palacio, llamò a Jesus le preguntò : “¿Eres tu el Rey de los judìos?”

Jesus le contestò : “Viene de ti esta pregunta o repites lo que te han dicho otros de mi?

Pilato respondiò : “¿Acaso soy yo judio ? Tu pueblo y los jefes de los sacerdotes te han entregado a mi; ¿que has hecho ?”

Jesus contestò : Mi reinado no procede de este mundo.
Si fuera rey como los de este mundo, mis guardias habrian luchado para que no cayera en manos de los judios.
Pero mi reinado no es de acà.”

Pilato le preguntò : “Entonces, ¿tu eres rey ?”

Jesus respondiò: “Tu lo has dicho : yo soy Rey. Yo doy testimonio de la verdad, y para esto he nacido y he venido al mundo.

Todo el que està del lado de la verdad escucha mi voz.”

 

¿QUÉ  DICE  EL  TEXTO? :

Pilato,  intrigado por la persona de Jesús, ya que los Sumos Sacerdotes y el pueblo se lo han entregado para que los juzgue.

Pilato lo interroga sobre su reinado. Jesús, a su vez, le pregunta si esa inquietud viene de él o la  ha oído de otros. Pilato, molesto, no le responde quiere saber ¿qué ha hecho?

Jesús profundiza más sobre su reinado, haciéndole ver que éste no es de este mundo, si fuera así, su gente habría luchado para impedir que lo detuvieran. Jesús afirma que sí es rey y , enseguida aclara, que ha venido a este mundo para dar testimonio de la Verdad y

que todo el que es de la Verdad lo escucha a Él.

 

M I R A R    A    J E S Ú S:

Después de la multiplicación de los panes, el pueblo quiere hacer rey a Jesús y Él huye. (Jn6,15)  Ahora, cuando es un despojo humano, se declara rey ante Pilato. De pie, con la dignidad de quien vino a este mundo para dar testimonio de la Verdad.

Su reino no tiene armas ni soldados. Los suyos son discípulos que buscan la Verdad.

El no se impone por el poder humano, sino que invita a vivir en un reinado de amor que no tiene límites ni fronteras. Donde todos tienen la dignidad de hijos de Dios.

 

¿Q U É   M E   D I C E  A  MÍ  E S T A  P A L A B R A?

 

-Jesús me invita a entrar en su Reino, exigiéndome un cambio de vida y de mentalidad.

-A reconocer la dignidad y grandeza de los despojados que no tienen poder humano.

-El único poder válido para Jesús, es el del amor y del servicio a todos, porque nos ha regalado el ser hijos e hijas de Dios.

 


¿A  Q U É  M E  LL A M A  E L  S E Ñ O R?

 

-En esta situación de pandemia, a seguir descubriendo el paso de Dios que, a través de los sencillos, nos habla el Señor.

-A sembrar pequeñas semillas del Reino, amando y sirviendo en silencio.

-A pedir la gracia de vivir con amor los despojos que suponen la edad y la enfermedad.

-A escuchar a María que nos dice: “Hagan todo lo que Él les diga”:  (Jn2,5)